Doha, 17 (Prensa Latina) Conforme suceden los Mundiales de fútbol cae en picada el rechazo en torno a la disputa del tercer puesto, y el choque Croacia-Marruecos podría cavar hoy la tumba de la frase «el partido que nadie quiere jugar».
Aunque todavía carga el calificativo de «duelo de consolación» -en buena medida por quedar tan cerca de la final-, conseguir un espacio en el podio alimenta las dosis emocionales y mejora notablemente el panorama económico.
De hecho, ningún equipo quisiera perder, pero a ello debe sumarse el honor que reviste colocarse entre los tres primeros, cerrar con victoria un evento de tanta magnitud y alcanzar dos millones de dólares más.
Un monto que aumentará las ganancias de jugadores, entrenadores, otros miembros del staff y asociación nacional, que, a su vez, invertirá en el desarrollo del fútbol en el territorio en cuestión.
Por ejemplo, en Rusia 2018, Bélgica superó 2-0 a Inglaterra para unirse a los líderes Francia, monarca, y el mismo Croacia, subtitular. Independientemente del mérito deportivo, los premios también marcaron diferencias.
Cada jugador de los «Diablos Rojos» recibió 313 mil euros (alrededor de 332 mil dólares en aquel momento) por quedar terceros, mientras que sin el éxito la prima hubiera sido de 281 mil.
En este Mundial de Qatar, las ganancias son mayores: el último ocupante de la tarima de reconocimientos recibirá 27 millones de euros (unos 27 millones 550 mil dólares) y el cuarto lugar obtendrá un total de 25, al tiempo que el rey hará suya una bolsa de 42 millones y el subcampeón 30. La diferencia es aún superior.
Es cierto que las emociones son diferentes, la intensidad baja, pero de ahí a no querer jugar ni desear ganar va un trecho tremendo. O acaso Marruecos desconoce que podría colocar a África en el podio por primera vez en la historia.
Incluso, Croacia anhela ratificarse en la tarima de los galardonados y darle a su astro Luka Modric la mejor despedida posible de los campeonatos mundiales, ya que no estará en 2026 en Estados Unidos-Canadá-México.
Dicho esto, los «Leones del Atlas» y los «ajedrezados» chocarán este sábado desde las 18:00, hora local, en el Estadio Internacional Khalifa, un día antes del desafío por la corona entre Argentina y Francia, actual líder supremo del fútbol.